Influencia del desarrollo de la cachorra de reposición sobre el desempeño y capacidad de supervivencia de las futuras camadas.

Los genotipos maternos modernos tienen un gran potencial para producir cada vez más lechones. Desde el año 2006, el tamaño de camada ha aumentado aproximadamente 0,33 cerdos por camada/año. Para poder lograrlo, es necesario introducir cachorras que permitan esta mejora genética o a través de incorporación de genética líquida en las granjas que tengan programas genéticos (progreso genético).

No obstante, si el manejo de estas cachorras de reposición es deficiente en alguna de las etapas de su desarrollo, que comprende desde su nacimiento hasta su primer parto, se pueden ver afectados tanto su rendimiento como la capacidad de supervivencia de su descendencia.

La otra mitad del éxito

La genética del macho es responsable por el 50% del potencial genético de los cerdos que producimos en nuestra granja. Por lo tanto, el buen manejo del padrillo es una parte fundamental de la cadena de valor porcina, ya que influye directamente sobre la producción y rentabilidad de nuestro sistema.

El consumo subóptimo durante la lactancia y sus consecuencias para la producción.

Una vez más, la selección por alta prolificidad nos enfrenta a un gran desafío: que la cerda produzca la cantidad de leche suficiente para alimentar a todos los lechones de la camada. Si bien las cerdas están preparadas fisiológicamente para producir gran cantidad de leche, la lactancia en cerdas hiperprolíficas es un proceso metabólicamente demandante, donde el consumo de alimento es muchas veces limitado, condicionando su éxito. Además, si la cerda no consume los nutrientes que necesita, utilizará sus reservas corporales, lo cual afectará negativamente su desempeño reproductivo y con ello, la productividad. En el presente artículo explicaremos cuáles son los factores que afectan el consumo de alimento durante la lactancia y qué podemos hacer para mejorarlo.

Enfrentando los desafíos de la alta prolificidad.

Durante los últimos 30 años, las empresas de genética se han enfocado en aumentar la prolificidad de las cerdas con el fin de mejorar la productividad. Actualmente, no es raro observar el nacimiento de 18-20 lechones por camada. Sin embargo,