0800 – 345 – NUTRI

NOVEDADES

La fabricación de los alimentos, de la teoría a la realidad

La formulación de alimentos va más allá de minimizar costos; se trata de alcanzar un delicado equilibrio entre la nutrición, la economía y la realidad operativa. Este artículo analiza los principales desafíos que enfrentan los nutricionistas al trasladar una fórmula desde la teoría a su aplicación práctica en las fábricas de alimentos, y propone estrategias para lograr una verdadera nutrición aplicada.

¿Podría el proceso de fabricación comprometer el rendimiento de una fórmula bien diseñada?

Lo que parece perfecto en un programa de formulación puede encontrar obstáculos inesperados en la fabricación. Como empresa de nutrición, siempre hemos seguido las fórmulas al menos durante la fase de producción y hemos hecho todo lo posible por descubrir su rendimiento en el campo. Pero no es tarea fácil.

Al comprender estas ealidades de la fabricación y mantener una comunicación fluida con los operadores de las fábricas de alimentos, los nutricionistas pueden acortar la distancia entre la formulación y el producto final, intentando garantizar que su alimento tenga el rendimiento previsto.

Cerrar la brecha entre la teoría y la práctica es uno de los desafíos más importantes para los nutricionistas. La transición de la formulación a la producción es una fase crítica en la vida de un alimento. Lo que parece perfecto en un programa de formulación puede encontrar obstáculos inesperados en la fábrica de alimentos. Los nutricionistas deben comprender y abordar estas realidades para garantizar que sus productos cumplan, al menos, sus propias expectativas.

Desafíos en la transición de la fórmula al producto final

Un problema común es la disponibilidad de ingredientes. Los formuladores pueden elegir los ingredientes óptimos para una dieta solo para descubrir que no están disponibles, son escasos, tienen un precio prohibitivo o ya no son adecuados debido a las malas condiciones de almacenamiento. No todos formulan con datos de stock en tiempo real. Por lo tanto, este desafío requiere un enfoque flexible, que permita sustituir ingredientes alternativos sin comprometer el equilibrio nutricional ni causar una crisis grave en la planta de producción de alimentos.

Otro de los problemas comunes es la incompatibilidad de los ingredientes. Por ejemplo, los ingredientes ricos en grasas pueden reducir la calidad de los pellets u obstruir la maquinaria, mientras que los polvos finos pueden causar problemas de polvo. Estos desafíos requieren ajustes en las técnicas de formulación y procesamiento. La alternativa son las interminables quejas de la fábrica de alimentos.

Las limitaciones de fabricación también son cruciales. La durabilidad, la fluidez y la homogeneidad de la mezcla suelen pasarse por alto durante la etapa de formulación. Por ejemplo, alimentos muy finos pueden mejorar la densidad de nutrientes, pero pueden causar segregación durante el transporte o la alimentación. Añadir un quelante a la mezcla puede parecer una idea interesante, pero los operadores de las fábricas se sentirán incómodos con esta idea, como mínimo. Los nutricionistas deben colaborar estrechamente con los operadores de las plantas de alimentos para garantizar el buen rendimiento del producto en cada etapa de la producción.

Las limitaciones de los equipos también imponen restricciones. La maquinaria antigua puede no procesar eficazmente ciertos ingredientes o pasos de procesamiento. Incluso las fábricas de alimentos más avanzadas deben equilibrar la eficiencia con las exigencias de dietas específicas, como las que requieren una mezcla lenta para incorporar aditivos delicados. Por otro lado, las consideraciones financieras y de costos pueden impedir el procesamiento adecuado de fórmulas que, de otro modo, serían excelentes.

Las pérdidas de nutrientes durante el procesamiento pueden afectar el rendimiento del producto. Las vitaminas y enzimas sensibles al calor, por ejemplo, pueden degradarse durante el porceso de pelletizado o la extrusión. Los nutricionistas deben elegir las presentaciones adecuadas de aditivos o utilizar métodos de aplicación posprocesamiento para preservar su eficacia.

Estrategias para una formulación eficaz y aplicable

Es crucial que haya una excelente conexión, comunicación y un vasto conocimiento entre la empresa de nutrición con la fábrica de alimentos, conociendo capacidades, limitaciones operativas, disponibilidad de materias primas, control de calidad de estas, capacidad de stock y almacenaje, junto con la disponibilidad de las granjas en cuanto a requerimientos y equipamientos disponibles para lograr cerrar la brecha entre teoría y realidad en la formulación de los alimentos.

Las consideraciones del usuario final siguen siendo primordiales. Los productores pueden tener preferencias o limitaciones específicas que influyan en sus prácticas de alimentación. Un producto perfectamente formulado, pero difícil de manipular o administrar, tiene pocas probabilidades de ser aceptado, por muy efectivo que sea. Por ejemplo, una granja podría no poder utilizar un programa de alimentación multifase simplemente porque solo cuenta con un silo.

Finalmente, la evaluación continua del rendimiento de las fórmulas en el campo es fundamental para cerrar el ciclo entre la formulación teórica y su aplicación práctica. Esta evaluación debe incluir el monitoreo de indicadores productivos, el registro y análisis de datos y no menos importante es el feedback directo desde la granja, lo cual permite identificar problemas no visibles desde la oficina o la planta.

Conclusiones

La formulación de alimentos balanceados es mucho más que una ecuación de nutrientes y costos. Requiere una comprensión profunda de los desafíos que surgen desde la planta de producción hasta la granja, y de cómo estos pueden afectar el rendimiento real de una dieta. La brecha entre la teoría y la práctica es un terreno donde la nutrición aplicada debe demostrar su valor.

Lograr una buena formulación no solo implica conocimientos técnicos, sino también una fuerte conexión entre los nutricionistas, los responsables de la fabricación y los usuarios finales. La comunicación, el monitoreo continuo y la flexibilidad para adaptar soluciones son herramientas clave para asegurar que el alimento formulado cumpla su propósito.

En este contexto, el verdadero éxito de una fórmula no radica únicamente en su diseño, sino en su capacidad para adaptarse, implementarse eficazmente y rendir en condiciones reales. Acortar la distancia entre lo ideal y lo posible no es solo un desafío, es una responsabilidad compartida.

Contenido del artículo

M.V. Rodrigo Plá – Responsable de Cuentas Estratégicas, Nutrifarms

PUBLICACIONES RECIENTES

La fabricación de los alimentos, de la teoría a la realidad

La formulación de alimentos va más allá de minimizar costos; se trata de alcanzar un delicado equilibrio entre la nutrición, la economía y la realidad operativa...

Regulación de comederos y el impacto en la producción porcina

La producción de carne de cerdo en Argentina alcanzó en 2024, un volumen de 785.047 toneladas, lo que representa un crecimiento del 3% en comparación con el año anterior...

Alimentación Electrónica de Precisión en cerdas: Sistemas ESF vs. Sistemas Convencionales 

La alimentación de cerdas en gestación ha evolucionado significativamente en las últimas décadas. La necesidad de optimizar la nutrición, mejorar el bienestar animal y maximizar la eficiencia productiva ha impulsado la adopción de tecnologías avanzadas, como los Sistemas de Alimentación Electrónica de Precisión...

Otra empresa de